En el segundo día de su mandato, el Presidente Joe Biden ha firmado 10 órdenes ejecutivas referentes al control de la pandemia de COVID-19. Una de ellas, “Orden ejecutiva acerca de la promoción de las medidas de seguridad contra el COVID-19 en los viajes nacionales e internacionales” establece una serie de restricciones nuevas para los viajeros internacionales a EE.UU. A partir del próximo martes, día 26 de enero de 2021, a todos aquellos que viajen a EE.UU de otros países se les exigirá un periodo de aislamiento de 7 días al llegar.
El decreto sugiere seguir las pautas del CDC- Centro para la prevención y control de las enfermedades de EE.UU.- “en la medida de lo posible” por lo que se refiere a los “periodos de auto-aislamiento recomendados”. El decreto no detalla la logística de esa cuarentena o de cómo tendrá que ser ejecutada.
Además del aislamiento obligatorio, los viajeros internacionales deberán presentar resultado negativo de la prueba de COVID-19 antes de embarcar a bordo de su vuelo a EE.UU. Este requisito del CDC también entrará en vigor a partir del 26 de enero.
El decreto de Biden requiere también que los pasajeros tanto de los vuelos nacionales como de los vuelos internacionales lleven puesta la mascarilla en aeropuertos, vuelos comerciales, trenes, embarcaciones marítimas públicas (incluyendo los transbordadores), servicios de autobús interurbano y todas las formas de transporte público de EE.UU.
Además, el decreto invita las agencias estadounidenses a discutir “los protocolos de sanidad pública para los puertos de entrada terrestre” con Canadá y México. La mayoría de los viajes no esenciales a las fronteras con estos dos países siguen restringidos al menos hasta el 21 de febrero.
Finalmente, la administración de Biden ha anunciado también sus planes de volver a instituir la prohibición de entrada para los ciudadanos no estadounidenses que han viajado recientemente a Brasil, Reino Unido, Irlanda y a la mayoría del continente europeo. El ex- Presidente Donald Trump había anulado esas restricciones el pasado lunes 18 de enero, cuya entrada en vigor había sido programada para el día 26 de enero.
